Un dolor de oído es un dolor agudo, sordo o ardiente en uno o ambos oídos. El dolor puede tener una variedad de causas, desde una infección hasta cambios de presión.
Los dolores de oído pueden ser debilitantes, pero no siempre justifican la administración de antibióticos. Las pautas de prescripción para las infecciones de oído han cambiado en los últimos cinco años. Asimismo, es posible que, en el caso de los niños, ni siquiera sea necesario que el médico les recete antibióticos.
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En concreto, no todas las infecciones de oído son bacterianas o necesitan medicamentos recetados. De hecho, podrías encontrar todo el alivio que requieres en la comodidad de tu hogar con tratamientos caseros. Por ello, usa estos remedios para aliviar el dolor de oído durante el confinamiento por COVID-19:
- Analgésicos de venta libre. La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) sugiere usar analgésicos de venta libre como ibuprofeno y paracetamol para controlar el dolor relacionado con un tipo doloroso de infección de oído, llamada otitis media aguda (OMA).
- Compresas frías o calientes. Colocar una bolsa de hielo o una compresa caliente sobre la oreja y alterna entre esta y la fría después de 10 minutos. Si prefieres frío o caliente, puedes usar solo una compresa.
- Aceite de oliva. Poner unas gotas calientes de aceite de oliva en el oído es seguro y es moderadamente efectivo para aliviar el dolor.
- Ejercicios de cuello. Algunos dolores de oído son causados por la presión en el canal auditivo. Se pueden realizar ciertos ejercicios de cuello para aliviar dicha presión. Los ejercicios de rotación del cuello son particularmente beneficiosos.
- Jengibre. El jengibre tiene propiedades antiinflamatorias naturales que pueden ayudar a aliviar el dolor de oído. Aplica jugo de jengibre, o aceite colado calentado junto con jengibre, alrededor del canal auditivo externo. No lo pongas directamente en tu oído.
- Ajo. El ajo tiene propiedades tanto antibióticas como analgésicas. Remoja el ajo machacado durante varios minutos en aceite de oliva o sésamo tibio. Cuela el ajo y aplica el aceite en el canal auditivo.
- Peróxido de hidrógeno. Para utilizar este tratamiento, coloca varias gotas de peróxido de hidrógeno en el oído afectado. Déjalo reposar durante varios minutos antes de escurrirlo en un fregadero. Enjuaga tu oído con agua destilada limpia.
- Goma de mascar. Mascar chicle también puede ayudar a liberar presión acumulada en el canal auditivo.
- Descansar en posición erguida. Descansar de esta forma en lugar de acostarte puede reducir la presión en el oído medio.
- Gotas para los oídos de venta libre. Las gotas óticas pueden reducir la presión en el oído ocasionada por los líquidos y el cerumen.
Vía: Healthline / Health Day News