Los cordones o cables para cortineros o persianas son sinónimo de riesgos potenciales para la seguridad de los niños pequeños, particularmente porque pueden sufrir asfixia.
En países como Estados Unidos, por ejemplo, cerca de 17,000 niños menores de 6 años fueron tratados en salas de emergencias debido a lesiones relacionadas con persianas o cortinas desde 1990 hasta 2015, según datos publicados recientemente en la revista Pediatrics.
Ante ello, la Academia Americana de Pediatría ofrece las siguientes sugerencias para ayudar a mantener a tus hijos más seguros:
- Las persianas con cables deben reemplazarse por persianas inalámbricas, persianas con cables inaccesibles u otros tipos de cubiertas para ventanas que carezcan de cable o cordón, como contraventanas interiores o cortinas deslizables.
- También se pueden instalar kits de modificación para eliminar los riesgos del cable.
- Las cunas, camas, sillones y otros muebles deben colocarse lejos de las persianas, para que los niños se mantengan alejados de ellas.
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Recuerda que los accidentes en el hogar son muy frecuentes, y en la mayoría de los casos ocurren en niños menores de 5 años. Uno de los mayores peligros es el ahorcamiento por cordones o cables de cortinas o persianas.
En general, “el niño” se encuentra en un plano elevado (un sofá, una cama, una mesa, etc.) y se enreda en el cordón, pierde el equilibrio y cae quedando colgado del cuello.
En primer lugar, se producen lesiones por asfixia debido a la compresión del hueso hioides (nuez de Adán) y su desplazamiento hacia atrás. Sin embargo, también se produce un compromiso circulatorio de los vasos del cuello, que determina la falta de llegada de sangre al cerebro y produce la pérdida de conocimiento asociada a estos episodios.
Finalmente, se añade un estímulo directo sobre el nervio neumogástrico (o nervio «vago»), que da lugar a trastornos respiratorios y del corazón de tipo reflejo.
Por todo lo anterior, sigue estos consejos y cuida de tus pequeños en casa, pues los accidentes están a la orden del día y pueden ser fatales, incluso con el mínimo descuido.
Vía: Health Day News
