Los niños disfrutan realizar actividades fuera y dentro del hogar. Una de ellas es el uso de videojuegos, los cuales tienen mala fama debido a ciertos contenidos, sin olvidar que representan un factor de riesgo para caer en el sedentarismo y desarrollar sobrepeso y obesidad.
La Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) recomienda que los menores dispongan de una amplia variedad de actividades dentro de su tiempo libre, como estar con amigos y hacer deporte.
Si bien resulta inevitable que los pequeños sientan atracción hacia los dispositivos electrónicos, u otras opciones ligadas a la tecnología, la vigilancia de los padres juega un papel muy importante para promover un uso saludable y responsable que evite la dependencia a este tipo de aparatos. Toma en cuenta las siguientes recomendaciones.
1. Contempla la clasificación de los contenidos. Los videojuegos tienen clasificaciones que indican si incluyen violencia, lenguaje obsceno u otros contenidos que pueden ser inadecuados para los niños.
2. Supervisa con anterioridad los juegos. Aunque los videojuegos estén clasificados por edades, es importante que los veas antes de dejar que tu hijo juegue con ellos. La clasificación del juego por edades puede no coincidir con lo que crees que es apropiado para tu hijo.
3. Ayuda a que el menor tome los juegos en perspectiva. Supervisa cómo están afectando los juegos a tu hijo. Si crees que está más agresivo después de pasar un rato jugando cierto videojuego, habla con él y ayúdale a entender que la violencia que refleja es distinta de la que ocurre en la vida real.
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Lo más importante es que, tanto tú como tu hijo, sientan comodidad respecto al tema. Considera que las prohibiciones suelen generar problemas dentro de la familia, motivo por el que la comunicación es clave para el uso adecuado de dispositivos electrónicos dentro del hogar. Esto aplica también para la televisión y los teléfonos móviles.
Vía: Kids Health
