El Zika es una enfermedad viral que se contrae debido a la picadura de un mosquito infectado.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) sugieren que te realices una prueba de detección de Zika si:
1. Muestras cualquier síntoma
Algunos de los síntomas más frecuentes y visibles incluyen ojos rojos, dolor en los músculos, dolor en las articulaciones, erupción cutánea, fiebre o dolor de cabeza. Es muy importante que te hagas la prueba, particularmente si estás embarazada.
2. Visitaste un área donde la infección por Zika es generalizada
El Zika se ha propagado por varios países de América (incluido México), África, Medio Oriente y Asia. Puedes ver un mapa mundial donde la infección es endémica (común) en el siguiente enlace.
3. Tuviste relaciones sexuales sin protección
Haber tenido relaciones sexuales con alguien que ya había manifestado síntomas de Zika, o que recientemente viajó a donde el virus está muy extendido. De haber sido así, debes hacerte la prueba incluso si no padeces síntomas.
Conoce más: Lo que debes saber sobre el virus Coxsackie y cómo afecta a los niños
Debes saber que para diagnosticar el Zika, un médico u otro proveedor de atención médica te preguntará si has viajado recientemente (dentro o fuera de tu país) y si has mostrado algún signo o síntoma. Las pruebas de detección más usadas son los análisis de sangre u orina, a fin de confirmar la infección. Dichas pruebas también ayudan a detectar otros virus, como el dengue o el chikungunya.
Finalmente, es fundamental que te asegures de obtener los resultados de tu prueba de detección de Zika incluso si ya te sientes mejor.
Vía: Health Day News / CDC
