Si tu hijo pequeño ha tenido episodios repetidos de amígdalas inflamadas, afección que en el ámbito médico se conoce como amigdalitis, es probable que sea candidato para una amigdalectomía, que es como se le denomina a la cirugía de extirpación de las amígdalas, así lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

La amigdalitis ocurre cuando las amígdalas (órganos que limpian las infecciones en la parte posterior de la garganta) se hinchan como resultado de una infección viral o bacteriana. Esto puede provocar problemas para tragar o incluso problemas para respirar.

Casi todos los niños contraen amigdalitis, con mayor frecuencia cuando tienen 2 años o más, menciona la biblioteca.

Por ello, te mencionamos 3 síntomas típicos de este padecimiento:

  1. Un dolor de garganta que dura más de dos días.
  2. Problemas o dolor al tragar.
  3. Sensación de estar muy enfermo o muy débil.

Conoce más: Algunos niños verían beneficiada su salud si se extirpan las amígdalas con más facilidad

Si estos síntomas se vuelven severos, busca atención médica sin demora. Algunos de ellos pueden incluir:

  • Glándulas inflamadas e hinchadas en su cuello (se siente como un bulto en el costado de su cuello).
  • Manchas blancas llenas de pus en sus amígdalas en la parte posterior de la garganta.
  • Mal aliento.

Los síntomas suelen desaparecer después de 3 a 4 días. La amigdalitis no es contagiosa, pero las infecciones que la causan sí lo son (por ejemplo, los resfriados y el virus de la influenza). Acude al médico para que tu pequeño(a) reciba el tratamiento más adecuado.

Finalmente, para evitar que estas infecciones se propaguen:

  • Mantén a tu hijo(a) en casa hasta que se sienta mejor.
  • Usa pañuelos cuando tosa o estornude y tíralos después de usarlos.
  • Lávate las manos después de toser o estornudar.

 

Vía: Health Day News / NHS UK