Las pistas sobre el desarrollo físico de tu hijo o hija se pueden encontrar en la forma en la que el bebé se mueve y juega, así lo indican los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC).
A la edad de 1 año, los CDC señalan que la mayoría de los niños deben poder realizar lo siguiente:
- Ponerse o colocarse en una posición sentada sin ayuda.
- Caminar mientras se aferran a los muebles.
- Dar unos pasos sin necesidad de aferrarse o agarrarse de algo.
- Ponerse de pie por sí mismo.
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RECUERDA: La acción temprana es la mejor manera de combatir un retraso en el desarrollo, de acuerdo con los centros. Si tu hijo(a) no ha alcanzado estos logros físicos o estás preocupado de que no lo haga en el tiempo esperado, habla con el médico/pediatra de tu pequeño(a) lo antes posible.
El retraso en el desarrollo suele ser un diagnóstico realizado por un médico basado en pautas estrictas. Sin embargo, es común que los padres sean los primeros en notar que su hijo no está progresando al mismo ritmo que otros niños de la misma edad. En algunos casos, el pediatra puede captar algún retraso durante una visita al consultorio. Probablemente tomará varias visitas y posiblemente ser referidos con un especialista en desarrollo para asegurarse de que dicha demora no sea solo un retraso temporal.
Vía: Health Day News / Michigan Medicine – University of Michigan
