Si bien las bebidas energéticas se promocionan como productos que aumentan la energía y mejoran el rendimiento, también pueden poner en riesgo la salud de las personas que las consumen.
Tan solo en Estados Unidos, entre 2007 y 2011, las visitas a la sala de emergencias relacionadas con bebidas energéticas se duplicaron. Esto porque, según los Institutos Nacionales de Salud de dicho país (NIH), el consumo excesivo de bebidas energéticas puede causar una serie de problemas de salud.
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Por ello, los NIH advierten sobre los efectos dañinos de consumir bebidas energéticas en exceso, que incluyen:
- Trastornos del sueño.
- Ansiedad.
- Problemas digestivos.
- Deshidratación.
Con base en lo anterior, es fundamental que evites estas bebidas durante la pandemia, ya que al provocar ansiedad y trastornos del sueño solamente se agravan estos efectos que también son producidos por la crisis que actualmente vivimos, además de los otros dos mencionados, pues el estrés o el mismo COVID-19 pueden desencadenar males gastrointestinales.
Vía: Health Day News
