Además de tener un gran sabor, el agua de coco es una bebida 100% natural, situación que la hace especialmente saludable. Como su nombre lo indica, se obtiene del coco inmaduro. Con el paso del tiempo, se convierte en la pulpa o parte blanca que se disfruta durante el verano.
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es una bebida con muchas propiedades, por lo que se recomienda su consumo en temporadas de calor. Entre sus beneficios destacan los siguientes.
- Ayuda a mejorar la secreción de insulina y la utilización de azúcar en la sangre.
- Contiene magnesio, mineral que mantiene saludable al sistema nervioso —al ser un tranquilizante natural—.
- No contiene colesterol —por lo que es una buena opción para la salud cardíaca—.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Incrementa la capacidad de absorción del calcio.
Pero eso no es todo. El agua de coco también regenera la flora intestinal y es considerada una bebida isotónica —rehidratante— natural. Es importante no confundirla con la leche de coco, debido a que son bebidas totalmente distintas y con diferentes propiedades.
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¡Pero cuidado!
Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), un vaso de agua fresca de coco contiene 252 mg de sodio. Esto no es un problema para la mayoría de la gente, pero sí para aquellas personas con la presión arterial alta, enfermedades del corazón o cualquier otra condición que le obligue a seguir una dieta baja en este ingrediente. De igual forma, se trata de un producto natural con alto contenido en azúcar.
En general, es una bebida hidratante con múltiples beneficios, siempre y cuando no se abuse de su ingesta —como en el caso de cualquier otro producto, ya sea natural o no—.
Vía: Notimex
