La Navidad es la festividad perfecta para convivir en familia y consentir a quienes más queremos. De igual forma, es una gran oportunidad para disfrutar platillos propios de la temporada.
Si bien existe un sinfín de recomendaciones para cuidar el peso durante estas fechas, en ocasiones olvidamos la importancia de prevenir alergias alimentarias que ponen en riesgo la salud de la familia.
Si te tocó ser anfitrión y preparar la cena, esta nota es ideal para ti.
1. Prepara todos los alimentos en casa. Aunque cocinar desde cero cuesta más trabajo, se trata de una práctica que garantiza áreas de preparación libres de alérgenos alimentarios. Incluso, es posible que ahorres tiempo al no tener que leer las listas de componentes.
2. Modifica las recetas a tu conveniencia. Piensa en las necesidades nutricionales de tu familia, así como en opciones saludables apegadas a los ingredientes. Reemplaza los lácteos normales por aquellos sin grasa, y elige granos naturales sin gluten en vez de trigo.
3. Ofrece postres saludables. Ten en mente opciones sin alérgenos, como bocadillos y postres. Puede ser fruta fresca con mantequilla de girasol; zanahorias con hummus; palomitas de maíz, entre otros postres. Una excelente alternativa para estas fiestas son las manzanas horneadas y espolvoreadas con canela y azúcar morena.
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4. Pregunta sobre alergias en tu familia. Si tu intención es que todos los comensales prueben tus platillos, es importante que antes de cocinar preguntes sobre algún tipo de alergia. Excluye ese ingrediente de la lista. No te desanimes, todos los componentes de una receta pueden reemplazarse.
5. En caso de no ser el anfitrión, ayuda. Si ayudas a planificar el menú o comprar ingredientes, puedes elegir los artículos que sabes que son seguros. De igual forma, puedes estar durante la preparación y asegurarte de que los alimentos estén preparados sin alérgenos.
Vía: Hola Doctor
