Los adultos necesitan dormir 7 u 8 horas por noche para lograr un sueño reparador, especialmente las personas mayores de 65 años, quienes suelen ver cambios significativos en su ciclo de descanso. Esto puede deberse a la edad, al estilo de vida o a problemas de salud.
De igual forma, interviene la reducción de ciertas hormonas en el organismo, como la melatonina, hormona natural que regula el ciclo del sueño. Otros factores que pueden afectar el descanso son:
- Fumar y beber alcohol.
- Algunos medicamentos.
- Problemas de salud, como diabetes, problemas de próstata, insuficiencia cardíaca o renal, entre otros.
Si bien es necesario visitar a un médico para reducir los estragos que provocan las enfermedades, y los fármacos recetados para combatirlas, es posible reducir los problemas de sueño en casa con ayuda de algunas medidas.
Conoce más: ¿Cómo influye la apnea del sueño en nuestro ánimo y en la memoria?
- Acuéstate y levántate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
- No duermas siestas de más de 20 minutos. Asimismo, evita leer, mirar televisión o comer en la cama. Utiliza la habitación sólo para dormir.
- Evita la cafeína antes de dormir, así como la nicotina y el alcohol por las noches.
- No permanezcas acostado durante mucho tiempo tratando de dormir. Después de 30 minutos de haberlo intentado, levántate y dirígete a otra habitación. Evita las actividades que estimulen tu cerebro; luego, vuelve a la cama e intenta quedarte dormido una vez más.
- Procura mantenerte activo durante el día. El ejercicio puede ayudarte a dormir mejor.
No olvides preguntar a tu médico de cabecera si alguno de los medicamentos que tomas podría estar interfiriendo en tu descanso. Toma en cuenta que algunos de estos fármacos son: antidepresivos, betabloqueadores y medicamentos cardiovasculares.
Vía: Family Doctor