Adicciones, Obesidad y nutrición
Si te gusta hacer ejercicio y beber alcohol, debes saber que esta es una muy mala combinación, ya que el hecho de ingerir regularmente bebidas alcohólicas puede hacer retroceder el progreso que has llevado.
El Consejo Americano del Ejercicio nos menciona algunos daños que pueden provocar beber alcohol frecuentemente y hacer ejercicio:
1. Debilitación muscular: El alcohol provoca que los músculos se debiliten debido a que relaja el flujo de sangre, por eso si quieres desarrollar una fuerte masa muscular debes prescindir del alcohol o dejarlo para situaciones esporádicas, pero eso sí, con moderación.
2. Hormonas: El alcohol afecta los niveles de hormonas particularmente de la testosterona, esto lleva a retener fluidos y grasa en el organismo.
3. Afectación de otros órganos: El alcohol como ya se sabe afecta el hígado, resultando en una baja de azúcar en la sangre lo que incrementa el colesterol en la sangre y las posibilidades de padecer hígado graso.
4. Oxígeno: El alcohol en forma regular cuando se tiene el hábito de hacer ejercicio reduce la capacidad del organismo para transportar oxígeno al cerebro.
5. Capacidades: Además el alcohol también limita las capacidades de las personas para concentrarse en lo que deben, lo que es una limitante muy importante a la hora de hacer ejercicio.
Si te quieres mantener en forma debes cambiar varios hábitos y entre ellos se incluye limitar el alcohol. Recuerda que el alcoholismo y el ejercicio son una muy mala combinación.
Vía: Health Library