La diabetes es una enfermedad crónica que puede hacer pensar a los pacientes que no pueden comer nada dulce, incluyendo las frutas. Lo cierto es que pueden y deben incluir frutas como parte de una dieta sana y equilibrada, ya que contienen fibra, vitaminas, minerales, antioxidantes y fitoquímicos.
¿Cuáles son las opciones saludables?
- Manzanas. Las manzanas son ricas en vitamina C y antioxidantes, además contienen una fibra soluble llamada pectina —principalmente en la cáscara—, que hace más lento el paso de los azúcares del estómago a los intestinos.
- Peras. Las peras son ricas en vitaminas y fibra soluble, que ayuda a regular la función intestinal. Al igual que las manzanas, contienen pectina, que ayuda a evitar los aumentos bruscos de azúcar en la sangre.
- Cítricos. Contienen vitamina C y fibra soluble. Además, son ricos en flavonoides, que aumentan la sensibilidad a la insulina; así como tiamina, que ayuda a las células a convertir los carbohidratos en energía.
- Kiwis. Contienen vitamina C, E y A, flavonoides, potasio y altas cantidades de betacaroteno, que protegen al organismo de los radicales libres.
- Frutos del bosque. La evidencia científica señala que los frutos del bosque están relacionados con una menor resistencia a la insulina y una mejor regulación de la glucosa en la sangre. Es importante no abusar de su consumo.
Las personas con diabetes deben entender que el exceso de glucosa puede traer consigo consecuencias graves, como lesiones en la vista, riñones y nervios; un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, derrames cerebrales e, incluso, la necesidad de amputaciones.
Antes de modificar tu dieta, consulta con un especialista cuáles son los frutos permitidos en tu alimentación, toda vez que cada organismo es diferente y necesita cantidades distintas de glucosa.
Vía: Hola Doctor
