Las prácticas alimentarias sostenibles, que implican saber de dónde provienen los alimentos y cómo cuidar y mantener dichas fuentes de alimento, nos ayudan a planificar para el presente y el futuro, ya que cuidamos nuestra salud mediante el cuidado del medio ambiente, así lo señala la Escuela T.H. Chan de Salud Pública de la Universidad de Harvard (Estados Unidos).
Por ello, es fundamental que des el primer paso y mires más allá del estante del supermercado, para que aprendas cómo se producen tus alimentos.
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Para lograrlo, la escuela sugiere lo siguiente:
- Planifica tus comidas alrededor de verduras y frutas.
- Minimiza la cantidad de carne que comes.
- Elige mariscos que no corran el riesgo de sobrepesca o sobreexplotación.
- Busca productos locales en los mercados de agricultores o en los tianguis.
- Ten conciencia de cuánto comes, a fin de evitar el desperdicio de alimentos.
RECUERDA: Es un hecho que lo que ponemos en nuestros platos genera un gran impacto en el medio ambiente. Comer de manera más saludable y sostenible va de la mano, lo que significa que podemos desarrollar prácticas alimentarias que ayuden a mejorar nuestra propia salud y, al mismo tiempo, beneficien la salud del planeta.
Asimismo, no olvides que prestar más atención a la forma en que comemos y pensar en el «panorama general» del mundo en el que vivimos, permitirá alterar nuestro consumo de alimentos y reducir su desperdicio, así como alentarnos a buscar fuentes de alimento más sostenibles.
Vía: Health Day News / Harvard T.H. Chan School of Public Health
