Como toda adicción, el apego a los dispositivos electrónicos —en especial a los celulares— es dañino para la salud, sin importar la edad. Así como puede provocar el desapego con el mundo real, es causa de accidentes por distracción. Si miras a tu alrededor y notas que todo el mundo está pegado a su teléfono, incluyéndote a ti, es momento de cambiar.
A continuación, te damos algunos consejos para acabar con la dependencia a tu teléfono.
1. Busca algo que te apasione. ¿En qué tipo de cosas quieres enfocar tu atención? Empieza por preguntarte qué quieres hacer con tu vida, para después analizar cómo tu teléfono, u otro dispositivo electrónico, se interpone con esos objetivos. Busca una razón positiva para cambiar y reordenar tus prioridades.
2. Replantéate lo que piensas sobre tu teléfono. Piensa que el tiempo que pasas usando tu teléfono móvil, no lo inviertes haciendo otras actividades placenteras, ya sean tus pasatiempos favoritos o compartir tiempo con tus amigos y familiares.
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3. Ponte obstáculos. Si lograste convencerte de que necesitas cambiar tu apego con el celular, pero no sabes cómo hacerlo, toma en cuenta las siguientes medidas.
- Carga tu celular fuera de tu habitación.
- Utiliza un reloj despertador en lugar de la alarma del teléfono.
- Borra algunas redes sociales y desactiva las notificaciones.
4. Ponte a prueba. Pon en práctica ciertas rutinas hasta que la obsesión se vaya disipando poco a poco. Por ejemplo, deja tu teléfono en casa mientras sales a dar un paseo.
5. Pide ayuda. Si has llegado a un punto preocupante, no dudes en acercarte a un especialista. Puedes hablarlo con tu familia o tus amigos. Si no encuentras la forma de terminar con el problema, acércate a un grupo de apoyo. Las personas que han pasado por una situación familiar pueden aconsejarte.
Vía: BBC Salud
