Según la Clínica Cleveland (Estados Unidos), durante sus primeras semanas de vida, los bebés recién nacidos mantienen la posición que tenían en el útero (posición fetal), que incluye mantener los puños cerrados; los codos caderas y rodillas doblados; y los brazos y piernas cerca del frente del cuerpo. Esto cambiará cuando tu bebé desarrolle más control sobre sus movimientos.
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Cuando dicho control comienza a manifestarse, los recién nacidos desarrollan varios reflejos naturales.
Por ello, la clínica nos menciona los reflejos del recién nacido, que incluyen los siguientes:
- Reflejo de enraizamiento.- El recién nacido gira en dirección a la comida y está listo para succionar. Acariciar la mejilla de un recién nacido causará esta respuesta.
- Reflejo de succión.- Si colocas un objeto en la boca de un bebé, el bebé naturalmente comienza a succionar.
- Respuesta de sobresalto.- El bebé estira los brazos y las piernas y luego los acurruca cuando se asusta. Esta respuesta a menudo incluye llorar.
- Reflejo tónico en el cuello.- El bebé gira la cabeza hacia un lado y extiende el brazo del mismo lado.
- Reflejo de agarre.- Los dedos del bebé se cierran fuertemente alrededor de un objeto colocado en la palma de su mano.
- Reflejo de pisar.- Los pies del bebé imitan una acción de pisar cuando se encuentra en posición vertical, con los pies tocando una superficie dura. Los brazos, las piernas y la barbilla de un bebé pueden temblar, especialmente cuando llora. Esto ocurre porque el sistema nervioso de los recién nacidos no está completamente desarrollado.
RECUERDA: Conocer todos estos reflejos te ayudará a comprender la causa o causas de algunos de los comportamientos de tu recién nacido, o si existe algún problema debido a la falta de uno o varios de estos reflejos.
Si tienes más dudas sobre esta y otras cuestiones relacionadas con tu recién nacido, no dudes en acudir con su pediatra o médico familiar.
Vía: Cleveland Clinic
