Tener un peso saludable de acuerdo a nuestra edad, género y estatura es un requisito fundamental para gozar de una óptima salud integral. Lo mejor es que para lograrlo no se requiere de mucha ciencia: se debe evitar consumir más calorías de las que utilizamos.
Aunque suena como algo sencillo, ya puesto en práctica se trata de una tarea que puede costar más trabajo a unas personas que otras. Lo cual es completamente entendible, ya que todos los organismos son diferentes.
Existen varios estudios e investigaciones al respecto, los cuales han llegado a diversas conclusiones, siendo la más común que no existen recetas ‘mágicas’. La mejor opción para tener un peso saludable es llevar una alimentación balanceada, beber agua y realizar ejercicio con frecuencia.
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No obstante, también se han encontrado algunos hallazgos que pueden complementar a los anteriores y ayudar a que las personas eviten consumir calorías de más. Algunas de las recomendaciones que hacen estas investigaciones son:
1. Color
De acuerdo con un reciente estudio, el color puede influir inconscientemente en la cantidad de comida y bebida que ingiere una persona. La investigación destaca que las personas comen y beben menos cuando los platos y cubiertos son de color rojo.
Asimismo, ingieren una mayor cantidad de alimentos y líquidos cuando los platos y cubiertos son del color favorito de una persona, cualquiera que este sea.
2. Iluminación
Una investigación encontró que la luz suave y relajante facilita que se coma a un ritmo más pausado, lo que permite que el estómago pueda enviar al cerebro el mensaje de que está satisfecho de forma más eficiente. Por otro lado, la iluminación brillante invita a las personas a comer rápido, lo que facilita que se pierda fácilmente la cuenta de las calorías.
3. Distracciones
A la hora de comer, mientras menos distracciones haya será mejor. Los expertos recomiendan no comer viendo la televisión o cualquier otro dispositivo, ya que este hábito ha sido asociado con una mayor ingesta de alimentos, tanto en los adultos como en los niños.
4. Comer en grupo
Estar con varias personas facilita que se consuman más alimentos y bebidas. Estudios muestran que mientras mayor es el grupo, más comida y bebidas se ingieren. La recomendación es que se organicen reuniones sociales en lugares que no siempre se centren en la comida.
5. Comprar con hambre
Ir de compras con hambre facilita que lo que se ve y se huele aumente el apetito, provocando que se opten por opciones de alimentos menos saludables y ricas en calorías.
6. No privarse completamente
Para sorpresa de muchos, un estudio encontró que una forma de comer menos calorías es permitirse caprichos limitados, en lugar de privarse por completo de ellos, ya que esto último puede resultar contraproducente y acabar en un atracón. Si nos gusta el helado, por ejemplo, se puede optar por comprar una porción cada semana, o bien caminar hasta la heladería más lejana para darse el gusto.
Vía: Health Library
