El cabello se torna seco cuando no tiene suficiente humedad y aceite para mantener su textura y brillo. La cabellera —así como las uñas— ayuda a mantener tu cuerpo protegido.
Sin embargo, más allá de las razones clínicas, mantenerlo en buen estado resulta indispensable para las personas, pues funge como una característica estética y de personalidad. Algunas causas por las que suele deshidratarse son:
- Anorexia nerviosa.
- Lavado excesivo o uso de jabones fuertes.
- Uso de secadores.
- Aire seco.
- Síndrome del cabello ensortijado de Menkes —las células en el cuerpo absorben cobre, pero son incapaces de liberarlo, volviendo frágil el cabello—.
- Desnutrición.
- Paratiroides hipoactiva —hipoparatiroidismo—.
- Tiroides hipoactiva —hipotiroidismo—.
Cuidados
- Usar shampoo con menos frecuencia, tal vez una o dos veces por semana.
- Recurrir a los acondicionadores.
- Evitar el uso de secadores y productos fuertes.
Debes prestar atención a la caída de tu cabello u otros problemas relacionados con la deshidratación. Toma en cuenta que de ignorar la salud de tu cuero cabelludo, puedes exponerte a una serie de problemas graves.
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Si lo que identificas es «caspa», corres el riesgo de sufrir dermatitis seborreica, una afección común que transforma la piel de la cabeza, convirtiéndola en grasosa, escamosa y descamada.
La dermatitis seborreica también puede afectar otras partes del cuerpo, como la cara, pecho, brazos, piernas e ingle.
Visita a un dermatólogo en caso de identificar problemas serios en tu piel y cabello.
Vía: Medline Plus/ FamilyDoctor.org
