Para ayudar a prevenir problemas respiratorios tanto en ti como en cualquier integrante de tu familia, debes asegurarte de mantener limpio el aire que se encuentra al interior de tu hogar.
Por ello, la Asociación Americana del Pulmón te deja las siguientes recomendaciones:
- No permitas que nadie fume dentro de tu casa.
- Realiza una prueba de radón para comprobar la presencia de este gas invisible, que ha sido vinculado con cáncer de pulmón.
- Pon en marcha un deshumidificador o aire acondicionado para mantener los niveles de humedad por debajo del 50 por ciento. Asimismo, mantén limpios los filtros que poseen dichos aparatos.
- Repara inmediatamente cualquier fuga que encuentres en las tuberías de agua.
- Mantén las plagas bajo control limpiando siempre los derrames de líquidos y alimentos, y almacénalos adecuadamente.
- Nunca utilices una estufa a base de leña (que debe usarse solo en exteriores) dentro de tu casa.
- Encuentra la fuente de cualquier olor desagradable y límpiala, en lugar de enmascarar el olor con velas y/o aerosoles para interiores.
- Opta por productos de limpieza del hogar que sean menos tóxicos.
Es importante hacer hincapié en la recomendación número 2, ya que quizás no habías escuchado hablar del radón. En Estados Unidos, por ejemplo, existen varias pruebas simples para medir la concentración de este gas en una vivienda, mismas que pueden adquirirse tanto en una ferretería como en una tienda de acabados para el hogar, al igual que en muchas oficinas estatales y locales, o en algunos centros académicos. Hay pruebas a corto y largo plazo: las primeras miden el nivel de radón de la vivienda entre 2 y 90 días, según el tipo de prueba. La recomendación general es empezar con una prueba de corto plazo y si el resultado es alto, confirmarlo con una segunda prueba.
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El promedio para el nivel interior de radón, medido en unidades llamadas picocuries, es de alrededor de 1.3 picocuries por litro de aire (pCi/L). Cuando los resultados son de 4 pCi/L o más, es necesario hacer modificaciones a la vivienda para reducir el nivel de radón.
En México es muy raro que se lleve a cabo este tipo de análisis en las viviendas, pero es importante saber que se realiza (y debería realizarse más a menudo en nuestro país), pues el radón es un gas invisible inoloro e insaboro que se encuentra en cualquier tipo de suelo, el cual se produce por la descomposición natural del uranio (un mineral radioactivo) en la tierra y, en consecuencia, emerge hacia el aire para entrar en casas y edificios a través de rajaduras en los cimientos o de uniones y espacios alrededor de las tuberías.
Este gas expone a las células pulmonares a pequeñas explosiones radioactivas, las cuales dañan el ADN de las células sensibles que revisten las vías respiratorias y crean el ambiente propicio para el desarrollo del cáncer de pulmón. Por eso es importante tener en cuenta esta información y tomar precauciones en lo referente al radón, pues en México existen yacimientos de uranio dentro de muy variados ambientes geológicos.
Vía: HealthDay News, Mayo Clinic, Servicio Geológico Mexicano