La antigua práctica del yoga puede brindarte un retiro momentáneo del caos de la vida, así lo señala la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos.

El objetivo del yoga es desafiarte físicamente sin sentirte abrumado(a). Se ha comprobado que la práctica de esta disciplina aporta beneficios tanto mentales como físicos.

Algunos de esos beneficios incluyen:

  1. Una mejor imagen corporal.
  2. Hábitos alimenticios conscientes y  saludables.
  3. Reducción en la tensión, estrés y ansiedad.
  4. Aumento de la aptitud física.
  5. Mejor salud de las articulaciones (particularmente en quienes sufren artritis).
  6. Reducción de la inflamación relacionada con enfermedades del corazón.
  7. Alivio del dolor de espalda.
  8. Más energía y mejor estado de ánimo.

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RECUERDA: Si eres capaz de realizar un saludo al sol, una serie simple de estiramientos, o una postura del árbol en un pie mientras tus brazos alcanzan el cielo, «el yoga es para ti», así lo afirma la doctora Pamela Jeter, investigadora de la Universidad Johns Hopkins. «No tienes que estar extremadamente en forma o ser súper flexible. En cualquier nivel, básico o avanzado, las posturas de yoga y la respiración brindan beneficios maravillosos para tu mente y tu cuerpo».

En un estudio reciente, la experta descubrió que un programa experimental de yoga de ocho semanas dirigido a personas legalmente ciegas mejoró su equilibrio, redujo su estrés y les ayudó a dormir mejor. Y en 2014, Jeter y otros especialistas revisaron 15 estudios que analizaron los efectos del yoga sobre el equilibrio, las caídas y el miedo a caerse en personas sanas. Su conclusión: el yoga tiene el potencial de reducir las caídas relacionadas con el equilibrio, aliviar las preocupaciones de que te vayas a caer y mejorar el equilibrio mientras estás de pie o caminando, todas buenas noticias para los adultos mayores que enfrentan un riesgo elevado de caídas y problemas de equilibrio.

Por esto y otras cosas, el yoga va mucho más allá de ser solo una tendencia pasajera. «El yoga es una forma de ejercicio, pero es más que eso», subrayó Jeter, quien también es instructora de yoga. «La respiración constante es muy importante y también otorga beneficios al sistema nervioso, pues va más allá de únicamente quemar calorías o fortalecer los músculos. El solo hecho de aprender a plantar los pies firmemente mientras realizas una postura fortalece las conexiones que te mantienen coordinado y flexible, por ejemplo».

Si tienes dudas sobre tu capacidad para practicar yoga, consulta con tu médico antes de comenzar un programa o rutina de entrenamiento.

 

Vía: Health Day News / Johns Hopkins Medicine