Algunas personas tienen problemas para digerir la proteína de la leche o el azúcar de la leche (intolerancia a la lactosa). Pero estos problemas son muy raros en los bebés. Hasta que un médico pueda evaluar a tu bebé, por lo general no es aconsejable cambiar de fórmula o dejar de amamantar como un medio para remediar posibles problemas de digestión de alimentos, así lo aconseja Michigan Medicine, en Estados Unidos.
La gran mayoría de los bebés diagnosticados con cólicos no tienen problemas de salud que afecten la digestión. Pero muchas cosas pueden causar cierto grado de gases abdominales, lo que puede empeorar el llanto.
Causas de los gases abdominales
- Tragar aire al succionar. Un bebé puede tragar un exceso de aire durante la alimentación con biberón si bebe demasiado rápido, si está acostado o si el pezón tiene orificios demasiado grandes. Si alimentas a tu bebé con biberón, usa tetinas con orificios lo suficientemente grandes como para que gotee la fórmula fría a 1 gota por segundo.
- Tragar aire al llorar. Un bebé que llora durante un período de tiempo prolongado, especialmente si el llanto es intenso, puede tragar más aire.
- Posición. Los bebés pueden atrapar los gases intestinales mientras están acostados boca arriba. Los bebés siempre deben dormir boca arriba para reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL). Pero cuando tu bebé está despierto(a), puedes ayudar a prevenir o aliviar algunas molestias abdominales al sostener a tu bebé en posición vertical o permitir un «tiempo boca abajo» mientras lo supervisas de cerca.
- Alimentación inadecuada. Darle ciertos alimentos a tu bebé puede llevar a que tenga un exceso de gases. Si el médico cree que la comida de tu bebé es una fuente de gas, es posible que te recomiende un cambio respecto a cómo lo estás alimentando.
- Espera para darle leche de vaca a tu bebé hasta que tenga 12 meses de edad. La proteína de esta leche puede ser difícil de degradar para el cuerpo de un bebé. Y la leche de vaca tiene menos hierro y vitaminas de las que necesitan los bebés.
- Muchos bebés menores de 4 meses no pueden digerir el almidón de los cereales.
- El jugo puede hacer que el bebé tenga un exceso de gases. Si decides darle jugo a tu hijo(a), es mejor esperar hasta que tenga al menos 12 meses y darle solo una pequeña cantidad.
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¿Cómo aliviar los gases?
- Utiliza una posición adecuada durante la alimentación. Alimenta a tu bebé en una posición parcialmente erguida y colócalo en un asiento para bebés durante unos 15 a 30 minutos después de alimentarlo. Asegúrate de hacer eructar a tu bebé durante y después de la alimentación.
- Masajea a tu bebé. Acuesta a tu bebé sobre su abdomen sobre tu regazo y masajea su espalda después de alimentarlo.
Si el médico de tu hijo(a) recomienda un medicamento para reducir los gases, utilízalo exactamente como se lo recetaron.
