La incontinencia intestinal, o incontinencia fecal, es cuando una persona tiene problemas para controlar sus intestinos, así lo indica el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS).
La afección puede ser muy molesta y vergonzosa, pero es importante buscar consejo médico si la padeces, ya que el tratamiento puede ayudar.
Signos y síntomas
La incontinencia intestinal puede afectar a las personas de diferentes formas.
Puedes tener el problema si:
- Tienes ganas repentinas de defecar que no puedes controlar.
- Te ensucias sin darte cuenta de que necesitabas el baño.
- A veces pierdes heces, por ejemplo, cuando liberas gas.
- Sucede todos los días o de vez en cuando. Un «accidente» único cuando estás enfermo de diarrea no suele ser un problema.
- Está afectando tu vida diaria, por ejemplo, te impide socializar.
- También puede tener otros síntomas, como estreñimiento, diarrea, pedos o hinchazón.
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Cuándo buscar consejo médico
Consulta a un médico de cabecera si tienes dificultades para controlar tus intestinos. No te avergüences de hablar con alguien al respecto.
Recuerda lo siguiente:
- No es algo de lo que avergonzarse
- Es común y los médicos de cabecera están acostumbrados a ver a personas que lo padecen
- No es algo que tengas que aguantar
- Probablemente no mejorará por sí solo
- Se puede tratar
Si prefieres no ver a un médico de cabecera, es posible que puedas programar una cita en tu servicio o unidad de salud. Llame a su hospital local para obtener detalles sobre el servicio más cercano.
Fuente: NHS