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Millones de personas luchan por perder peso y mejorar su dieta. Encontrar una dieta que funcione para ti y después seguirla puede ser un gran desafío. Los dietistas registrados son expertos en dieta y nutrición, en particular para promover la salud general y tratar afecciones como el colesterol alto. Un dietista puede evaluar tu dieta y crear un plan para reducir el colesterol, así como un menú detallado que se adapte a tu estilo de vida y rutina diaria.

Un dietista te preguntará sobre tus hábitos alimenticios. Por ejemplo:

  • ¿A qué horas del día sueles comer?
  • ¿Te saltas las comidas?
  • ¿Cuándo comes tu comida más grande del día?
  • ¿Dónde comes normalmente? ¿En el trabajo? ¿En casa?
  • ¿Cómo se preparan las comidas en casa? ¿A partir de alimentos envasados ​​o frescos?
  • ¿Cuáles son tus comidas favoritas?

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Un dietista puede sugerir estrategias y consejos para adaptarte a tu nueva dieta. La mayoría recomendará que migres gradualmente a tu nueva alimentación. El dietista también puede enseñarte cómo llevar un registro de la cantidad de grasas saturadas, grasas trans y calorías en tu dieta y cómo hacer ajustes graduales de manera continua hasta que logres tus objetivos básicos. Particularmente, un dietista puede ayudar a que tu nueva dieta sea divertida recomendándote recetas creativas y ayudándote a encontrar formas de comer los alimentos que más disfrutas.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health