La hipertensión ocurre cuando la sangre ejerce demasiada presión contra las paredes de las arterias. Si bien no siempre viene acompañada de síntomas, puede causar problemas graves como infarto cerebral, fallo cardíaco, ataque al corazón e insuficiencia renal.
A decir de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, ciertos cambios saludables en el estilo de vida pueden ayudar a bajar la presión arterial alta, como:
- Perder peso.
- Estar físicamente activo.
- Controlar el estrés.
- Reducir el sodio en la dieta.
- Evitar el alcohol y el tabaco.
- Dormir lo suficiente.
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En ocasiones, los cambios en el estilo de vida por sí solos no pueden controlar o reducir la presión arterial alta. En estos casos, un especialista puede recetar ciertos medicamentos.
Los medicamentos para la presión arterial actúan de diferentes maneras. Algunos de ellos son:
- Inhibidores y bloqueadores de la enzima convertidora de angiotensina. Evitan que los vasos sanguíneos se estrechen demasiado.
- Bloqueadores de los canales de calcio. Evitan que el calcio ingrese a las células musculares del corazón y los vasos sanguíneos. Esto permite que los vasos sanguíneos se relajen.
- Diuréticos. Eliminan el exceso de agua y sodio del cuerpo. Esto reduce la cantidad de líquido en la sangre. A menudo, los diuréticos se usan con otros medicamentos para la presión arterial alta, a veces en una sola píldora combinada.
- Betabloqueantes. Ayudan a que el corazón lata más lento y con menos fuerza. Esto significa que el corazón bombea menos sangre a través de los vasos sanguíneos. Los bloqueadores beta generalmente se usan solo como una opción de respaldo.
Si tu tratamiento incluye alguno de estos medicamentos, es esencial que cuides tus hábitos y hagas cambios saludables en tu estilo de vida. Si tienes dudas, acércate a un profesional de la salud. ¡No te automediques!
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
