Los amantes del café saben que una taza de café puede brindar energía y claridad mental rápidamente todas las mañanas, pero una nueva investigación publicada en la revista Frontiers in Aging Neuroscience sugiere que también puede proteger contra la enfermedad de Alzheimer a largo plazo.

«En todo el mundo, una alta proporción de adultos bebe café todos los días, lo que lo convierte en una de las bebidas más consumidas», señaló Samantha Gardener, investigadora postdoctoral en la Universidad Edith Cowan en Australia Occidental y autora principal del estudio.

«Con la enfermedad de Alzheimer, actualmente no existe ningún tratamiento eficaz que modifique la enfermedad. Nuestro grupo de investigación está analizando específicamente los factores de riesgo modificables que podrían retrasar su aparición, e incluso un retraso de cinco años podría tener enormes beneficios sociales y económicos», añadió.

Para el estudio, Gardener y su equipo investigaron si la ingesta de café afectaba la tasa de deterioro cognitivo durante 10 años en más de 200 personas que formaron parte del Estudio Australiano de Imágenes, Biomarcadores y Estilo de Vida.

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Los investigadores descubrieron que las personas que no tenían problemas de memoria y que consumían cantidades más altas de café tenían un riesgo menor de pasar a un deterioro cognitivo leve. Esta etapa generalmente precede a la enfermedad de Alzheimer. Tales participantes también mostraron un menor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer durante el período de estudio.

Además, la investigación reveló que una mayor ingesta de café parecía estar ralentizando la acumulación de proteína amiloide en el cerebro, y se relacionó con resultados positivos en las áreas cerebrales encargadas de la función ejecutiva y la atención.

Aunque Gardner destacó que beber café podría ser una forma fácil de retrasar la aparición de la enfermedad de Alzheimer, todavía se requiere una mayor investigación.

Pero gracias a estos hallazgos, se sabe que obtener beneficios para el cerebro podría ser tan simple como servir otra taza. Esto significa que aumentar la ingesta de café de una taza a dos podría potencialmente reducir el deterioro cognitivo en un 8% durante 18 meses y disminuir la acumulación de amiloide en el cerebro en un 5%, subrayó Gardener.

 

Fuente: Health Day News