En una dieta libre de gluten, no debes comer trigo, centeno ni cebada, ya que estos alimentos contienen gluten, un tipo de proteína. Una dieta sin gluten es el principal tratamiento para la enfermedad celíaca. Algunas personas creen que dicha dieta también puede ayudar a mejorar otros problemas de salud, pero existe poca investigación que respalde esta idea.
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Con base en lo anterior, las personas siguen una dieta sin gluten por varias razones:
- Enfermedad celíaca. Las personas con esta afección no pueden comer gluten porque desencadena una respuesta inmunitaria que daña el revestimiento de su tracto gastrointestinal. Dicha respuesta ocasiona inflamación en el intestino delgado y dificulta que el cuerpo absorba los nutrientes de los alimentos. Los síntomas incluyen hinchazón, estreñimiento y diarrea.
- Sensibilidad al gluten. Las personas con sensibilidad al gluten no tienen enfermedad celíaca. Comer gluten causa muchos de los mismos síntomas que en la enfermedad celíaca, sin daño estomacal.
- Intolerancia al gluten. Esto describe a las personas que tienen síntomas y pueden tener o no la enfermedad celíaca. Los síntomas incluyen calambres, hinchazón, náuseas y diarrea. Si tienes una de estas afecciones, una dieta sin gluten te ayudará a controlar tus síntomas. También ayuda a prevenir problemas de salud en personas celíacas. Si sospechas tener alguna de estas afecciones, habla con tu médico antes de realizar cualquier cambio en la dieta.
- Otros argumentos de beneficios para la salud. Algunas personas no comen gluten porque creen que puede ayudar a controlar problemas de salud como dolores de cabeza, depresión, fatiga prolongada (crónica) y aumento de peso. Sin embargo, estas afirmaciones no están comprobadas.
