Según una investigación del año 2019, hasta el 75 por ciento de los adultos mayores experimentan algunos síntomas de insomnio.
Conoce más: ¿Cuáles son los tipos de insomnio?
Algunos factores distintos contribuyen al insomnio en la edad adulta mayor, y estos pueden tener un efecto dominó. Tales factores incluyen los siguientes:
- Los cambios relacionados con la edad en los ritmos circadianos responsables de tu ciclo de sueño y vigilia pueden hacer que sea más difícil conciliar el sueño o permanecer dormido(a).
- Si estás jubilado(a), es posible que ya no tengas un horario diurno constante ni una interacción social regular, los cuales pueden contribuir al insomnio.
- El aislamiento social puede contribuir a la soledad y aumentar las posibilidades de experimentar depresión, lo que también puede aumentar el riesgo de problemas para dormir.
- Los problemas de salud relacionados con el envejecimiento, incluidas las condiciones de dolor crónico, también pueden afectar tu sueño.
- Si no duermes lo suficiente por la noche, es posible que te sientas somnoliento(a) y con fatiga durante el día. Como resultado, es posible que estés más inclinado(a) a tomar una siesta. La siesta, por supuesto, puede dejarte menos cansado(a) a la hora de acostarte, alimentando un ciclo de insomnio.
Con base en la información anterior, si experimentas insomnio, un terapeuta o médico pueden ofrecerte más apoyo para encontrar opciones de tratamiento útiles.
Fuente: Healthline
