La diabetes gestacional no suele causar ningún síntoma. La mayoría de los casos solo se descubren cuando se analizan los niveles de azúcar en sangre durante la detección de la condición.
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La mayoría de las mujeres con diabetes gestacional tienen embarazos por lo demás normales y con bebés sanos. Sin embargo, la afección puede causar problemas como:
- Tu bebé crece más de lo normal: esto puede ocasionar dificultades durante el parto y aumenta la probabilidad de que necesites un parto inducido o una cesárea.
- Polihidramnios: demasiado líquido amniótico (el líquido que rodea al bebé) en el útero, lo que puede causar un parto prematuro o problemas durante el parto.
- Parto prematuro: dar a luz antes de la semana 37 de embarazo.
- Preeclampsia: una afección que causa presión arterial alta durante el embarazo y puede provocar complicaciones si no se trata.
- Tu bebé puede desarrollar niveles bajos de azúcar en la sangre o coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia) después de nacer, lo que puede requerir tratamiento en el hospital.
- La pérdida de tu bebé (mortinato), aunque esto es muy raro.
RECUERDA: Tener diabetes gestacional también significa que tienes un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en el futuro, por lo que debes acudir a revisión periódica con tu médico y llevar hábitos de vida saludables.
Fuente: National Health Service UK (NHS)
