La marcha de Trendelenburg es una condición que puede presentarse cuando la forma en que caminas se ve afectada porque hay debilidad en los músculos abductores de la cadera. Si tus glúteos son demasiado débiles para soportar tu peso mientras caminas, caminarás con un movimiento notable de lado a lado. Puede parecer que estás cojeando o perdiendo un paso.
Esta forma de andar no significa necesariamente que haya algún problema con las caderas o que tengas una afección subyacente grave. De hecho, a veces se le llama marcha osteogénica indolora porque generalmente no duele ni interrumpe tu vida cotidiana. A menudo, puedes minimizar sus efectos a través de ejercicios específicos o fisioterapia.
Esta forma de andar comúnmente resulta de la tensión de los músculos abductores de la cadera durante la actividad física. Los ejercicios destinados a fortalecer los glúteos son un culpable común. En este caso, la marcha Trendelenburg probablemente desaparecerá a medida que se reduzca la inflamación muscular.
Dicha marcha también puede aparecer después de una cirugía de reemplazo total de cadera. Durante este procedimiento, tu cirujano tendrá que hacer incisiones en el músculo glúteo medio. Esto puede debilitar el músculo y hacer que camines con la forma de andar antes citada.
La debilidad en estos músculos también puede deberse a:
- Daño o disfunción de los nervios, especialmente en aquellos que se extienden a través de los músculos menor y medio de los glúteos.
- Osteoartritis, un tipo de artritis que ocurre cuando el cartílago articular comienza a desgastarse.
- Poliomielitis, una afección asociada con el virus de la poliomielitis que debilita los músculos.
- Disostosis cleidocraneal, una condición presente desde el nacimiento que puede causar que tus huesos se desarrollen incorrectamente.
- Distrofia muscular, una afección que hace que los músculos y los huesos se debiliten con el tiempo.
Si tienes más dudas sobre la marcha de Trendelenburg, consulta a tu médico.
Fuente: Healthline