Si te cuesta trabajo realizar tareas que implican ver a distancias cercanas (como maquillarte o peinarte) y acabas de cumplir 40 años, es posible que estés experimentando la pérdida de la capacidad para enfocar de cerca, llamada presbicia.
De acuerdo con la Clínica Cleveland, la presbicia es parte del proceso natural de envejecimiento del ojo y se puede corregir fácilmente. En concreto, la presbicia es la pérdida de la capacidad del ojo para cambiar su enfoque cuando intenta ver objetos que se encuentran cerca. Generalmente, la presbicia comienza a aparecer alrededor de la cuarta década de vida, y empeora progresivamente hasta más o menos los 60 años, cuando suele estabilizarse. Asimismo, no afecta tu visión de distancia de referencia.
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La presbicia afecta a hombres y mujeres por igual. Debido a que la condición continuará a lo largo de tu vida, es importante comprender que puede complicar otras afecciones comunes de la vista, como la hipermetropía, la miopía y el astigmatismo. Los oftalmólogos llaman a estas condiciones comunes de enfoque errores de refracción.
Los síntomas que quizás notes y pueden ayudarte a detectar presbicia incluyen los siguientes:
- La necesidad de más luz durante la lectura.
- Visión borrosa a una distancia de lectura normal.
- La necesidad de mantener el material de lectura a distancia.
- Dolores de cabeza por hacer trabajos de cerca.
- Fatiga visual.
RECUERDA: Comprender la salud de tus ojos y hacerte exámenes de la vista con regularidad te ayudará a seguir viendo con claridad y comodidad.
Fuente: Cleveland Clinic
