¿Sabías que un solo huevo aporta seis gramos de proteína y 14 nutrientes esenciales? Incluyendo vitaminas A, B, D y E, además de ser fuente de calcio, selenio y yodo. Estas propiedades lo vuelven un superalimento. Sin embargo, existe el riesgo de contraer enfermedades a través de su consumo, como Salmonella.
A decir de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), incluso los huevos frescos —con cáscaras limpias, sin rajaduras— contienen bacterias llamadas Salmonella, que pueden causar enfermedades transmitidas por alimentos, a menudo llamadas “intoxicación alimentaria”.
Para ayudar a prevenir las enfermedades vinculadas con los huevos, la FDA recomienda tomar decisiones de compra sabias en la tienda de comestibles, por ejemplo:
- Compra huevos sólo si son vendidos desde un refrigerador o un recipiente refrigerado.
- Abre la caja y asegúrate de que los huevos estén limpios y que las cáscaras no estén rajadas.
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¿Cómo almacenar los huevos en casa?
El almacenamiento correcto de los huevos puede afectar tanto la calidad como la seguridad. ¡Pon atención!
- Almacénalos rápidamente en un refrigerador limpio a una temperatura de 4° C o menos. Usa un termómetro de refrigerador para verificar.
- Guarda los huevos en su caja original y úsalos dentro de 3 semanas para mejor calidad.
- Usa huevos duros —en la cáscara o pelados— dentro de 1 semana después de ser cocidos.
- Consume huevos congelados dentro de 1 año. Los huevos no deben ser congelados en sus cáscaras. Para congelar huevos enteros, bate las yemas y las claras juntas. Las claras de los huevos también pueden ser congeladas aparte.
- Refrigera los platos sobrantes de comida cocinados con huevos y consúmelos dentro de 3 o 4 días.
La ingesta de bacterias peligrosas transmitidas por los alimentos suele causar malestar entre 1 y 3 días después de haberlos consumido. Si bien la mayoría de las personas se recuperan, en algunos casos se pueden desarrollar problemas de salud crónicos.
Visita a un profesional de la salud si experimentas vómitos, diarrea y dolor abdominal. Recuerda que los síntomas de intoxicación son similares a los de la gripe, como fiebre, dolor de cabeza y dolor corporal.
Fuente: Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés)