El ciberacoso (o cyberbullying) es un tipo de acoso que ocurre a través de Internet o de mensajes de texto en dispositivos digitales. Puede ser a través de correos electrónicos, redes sociales, foros o juegos, así lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Algunos ejemplos incluyen los siguientes:
- Publicar rumores en las redes sociales.
- Compartir fotos o videos vergonzosos en línea.
- Compartir la información privada de otra persona en línea (doxing).
- Hacer amenazas contra alguien en Internet.
- Crear cuentas falsas y publicar información para avergonzar a alguien.
Ciertos tipos de ciberacoso pueden ser ilegales. Las leyes sobre el cyberbullying difieren de un país a otro.
Diferencia con el acoso escolar
El ciberacoso es un tipo de acoso, pero existen algunas diferencias entre este y el acoso escolar. En concreto, el ciberacoso puede ser:
- Anónimo: las personas pueden ocultar sus identidades cuando están en línea o cuando utilizan un teléfono celular.
- Persistente: las personas pueden enviar mensajes al instante, en cualquier momento del día o de la noche.
- Permanente: gran parte de la comunicación electrónica es permanente y pública, a menos que se informe y se elimine. Una mala reputación en Internet puede afectar el ingreso a una universidad, las oportunidades para conseguir un trabajo y otras áreas de la vida. Esto también se aplica al acosador.
- Difícil de notar: es posible que los maestros y los padres no escuchen o no se den cuenta de que sus alumnos/hijos están sufriendo ciberacoso.