Agua de limón
Por si aún no lo sabías, el efecto alcalino del agua de limón permite neutralizar la acidez estomacal y mejorar la digestión. Para ello, solo debes mezclar una cucharada de jugo de limón en un vaso de agua caliente o tibia y beber la mezcla unos minutos antes de comer.
Además de aliviar la indigestión, el agua de limón también es una excelente fuente de vitamina C. Sin embargo, beber demasiada agua de limón puede desgastar el esmalte dental y provocar un aumento de las ganas de orinar. Por ello, para proteger tus dientes, enjuágate la boca con agua del grifo después de beber agua de limón.
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Raíz de regaliz
Los estudios han demostrado que la raíz de regaliz puede calmar los espasmos musculares y la inflamación en el tracto gastrointestinal, que a su vez pueden provocar indigestión. Para ello, mastica la raíz de regaliz para aliviar los síntomas, o añádela a agua hirviendo y, una vez que haya hecho infusión, bebe la mezcla.
Cabe mencionar que aunque es eficaz para la indigestión, la raíz de regaliz puede causar desequilibrios de sodio y potasio, así como presión arterial alta, si se consume en grandes dosis. Por lo anterior, no consumas más de 2.5 gramos de raíz de regaliz seca por día para un alivio rápido. Los expertos recomiendan comer o beber raíz de regaliz 30 minutos antes de la comida del día o una hora después de comer
Fuente: Healthline
