De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los tumores cerebrales son crecimientos anormales dentro del cráneo que dan lugar a una serie de síntomas neurológicos. Se encuentran entre los tipos más comunes de cánceres infantiles.
Algunos son tumores benignos (no son cáncer), pero todavía pueden ser graves. Los tumores malignos siempre son cancerosos.
Cabe mencionar que los tumores cerebrales y de médula espinal en los niños pueden causar dolores de cabeza y otros síntomas. Sin embargo, otras condiciones también pueden ocasionar la misma sintomatología. Por ello, es importante acudir con un médico si tu hijo(a) manifiesta alguno de los siguientes problemas:
- Dolor de cabeza matutino o dolor de cabeza que desaparece después de vomitar
- Náuseas y vómitos frecuentes
- Problemas de visión, audición y habla
- Pérdida del equilibrio o dificultad para caminar
- Somnolencia inusual
- Cambios de personalidad
- Convulsiones
- Aumento del tamaño de la cabeza en los bebés
Conoce más: ¿Qué causa los tumores cerebrales y cómo se tratan?
RECUERDA: Los síntomas no son los mismos en todos los niños. Los médicos utilizan exámenes físicos y neurológicos, pruebas de laboratorio y estudios de imágenes para diagnosticar los tumores cerebrales. La mayoría de los tumores que se presentan en niños se diagnostican y extirpan mediante cirugía.
El tratamiento para los menores a veces difiere del que se le brinda a los adultos. Los efectos secundarios a largo plazo son un tema importante. Asimismo, las opciones para extirpar un tumor dependen del tipo y de su ubicación. Generalmente, es posible extirparlo; pero cuando no, se puede usar radiación, quimioterapia o ambas.