El cáncer de cabeza y cuello incluye cánceres de boca, nariz, senos paranasales, glándulas salivales, garganta y ganglios linfáticos en el cuello. La mayoría comienza en los tejidos húmedos que recubren la boca, la nariz y la garganta, así lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Los síntomas característicos incluyen:

  1. Un bulto o llaga que no cicatriza
  2. Un dolor de garganta que no desaparece
  3. Dificultad al tragar
  4. Un cambio o ronquera en la voz

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Los cánceres de cabeza y cuello son dos veces más comunes en los hombres. El consumo de tabaco o alcohol incrementa su riesgo. De hecho, alrededor del 75% de estos cánceres están relacionados con el consumo de tabaco, lo que incluye fumar cigarros o masticar tabaco. La infección por VPH es un factor de riesgo para algunos cánceres de cabeza y cuello.

Para diagnosticar dicho cáncer, tu médico realizará un examen físico y pruebas de diagnóstico. Se te realizará una biopsia, en la cual se extrae una muestra de tejido y se examina bajo un microscopio. Es la única prueba que puede decir con certeza si padeces la enfermedad.

Si se detectan a tiempo, los cánceres de cabeza y cuello suelen ser curables. Los tratamientos pueden incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia o una combinación, pero hay que advertir que pueden afectar la alimentación, el habla o incluso la respiración, por lo que los pacientes quizás requieran rehabilitación.

 

Fuente: U.S. National Library of Medicine