Un estudio del sueño, también conocido como polisomnografía, es una prueba que mide y registra diferentes funciones corporales mientras duermes. Tales funciones incluyen:
- Frecuencia respiratoria
- Oxígeno en sangre
- Ritmo cardíaco
- Ondas cerebrales
- Movimientos de piernas
- Movimientos oculares
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En concreto, la prueba se utiliza para diagnosticar trastornos del sueño. Los trastornos más comunes del sueño incluyen los siguientes:
- Apnea del sueño, una condición que hace que dejes de respirar brevemente mientras duermes. Es posible que tengas varios episodios repetidos de interrupciones de la respiración durante una sola noche de sueño. Puede haber hasta 30 episodios por hora.
- Insomnio, un trastorno que puede hacer más difícil conciliar el sueño y/o permanecer dormido(a) durante toda la noche.
- Síndrome de piernas inquietas, una afección que produce sensaciones incómodas en las piernas y una fuerte necesidad de moverlas mientras intentas conciliar el sueño.
- Narcolepsia, una condición neurológica, la cual provoca somnolencia extrema durante el día. También puede hacer que te duermas repentinamente a lo largo del día.