Los glóbulos blancos son una parte fundamental del sistema inmunológico de tu cuerpo. Son responsables de protegerte contra infecciones y organismos invasores. En total, los seres humanos contamos con cinco tipos de glóbulos blancos:
- Neutrófilos (son los más abundantes en la sangre humana)
- Linfocitos (provienen de la diferenciación linfoide de las células madre hematopoyéticas ubicadas en la médula ósea)
- Monocitos (son los de mayor tamaño)
- Eosinófilos (migran a los tejidos en donde permanecen durante varios días)
- Basófilos (son los menos numerosos)
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Cada uno de estos puede verse afectado de diferentes maneras si tienes una condición o enfermedad en particular.
Un recuento de glóbulos blancos (RGB) mide la cantidad de glóbulos blancos en tu sangre, y un diferencial de RGB determina el porcentaje de cada tipo de glóbulo blanco presente en tu torrente sanguíneo. Sumado a lo anterior, un diferencial puede detectar glóbulos blancos inmaduros y anomalías, los cuales son signos de posibles problemas.
Un recuento de glóbulos blancos también recibe el nombre de recuento de leucocitos, y un diferencial de glóbulos blancos también puede llamarse recuento de diferencial de leucocitos.
Fuente: Healthline
