La depresión en adolescentes —es decir, en jóvenes de entre 13 y 17 años— es una enfermedad médica grave. A decir de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, varios factores pueden jugar un papel en este tipo de depresión, por ejemplo:
- Genética.
- Biología cerebral y química.
- Hormonas.
- Eventos estresantes en la niñez.
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¿Quiénes están en riesgo de depresión adolescente?
La depresión puede ocurrir a cualquier edad, pero a menudo comienza en la adolescencia o al comienzo de la adultez. Ciertos adolescentes tienen un mayor riesgo de depresión, como quienes:
- Tienen otras afecciones de salud mental, como ansiedad, trastornos de la alimentación y uso de sustancias nocivas para la salud.
- Tienen enfermedades crónicas, como diabetes, cáncer y enfermedades del corazón.
- Tienen familiares con enfermedades mentales.
- Tienen un conflicto familiar o una familia disfuncional.
- Tienen problemas con amigos u otros compañeros en la escuela.
- Tienen discapacidades de aprendizaje o trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
- Han sufrido un trauma en la infancia.
- Tienen baja autoestima.
- Tienen poca capacidad de enfrentar situaciones.
- Son miembros de la comunidad LGBTQIA+, especialmente cuando sus familias no los apoyan.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión en adolescentes?
Uno o más de estos síntomas se presentan con frecuencia:
- Tristeza.
- Sensación de vacío.
- Desesperanza.
- Sentir enojo, irritación o frustración, incluso por cosas menores.
- Cambios en el sueño.
- Problemas con el peso, entre otros.
Si te sientes identificado, busca la ayuda de un profesional de la salud mental. Recuerda que no estás solo, el tratamiento adecuado puede ayudarte a mejorar tu calidad de vida.
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
