La ceguera nocturna, o nictalopía, es cuando el ojo no puede adaptarse a condiciones de poca luz, como por ejemplo cuando cae la noche. La ceguera nocturna en sí no es una condición sino el resultado de un trastorno ocular existente.

Cuando la iluminación es tenue, el ojo debe adaptarse. Aunque la ceguera nocturna afecta negativamente la capacidad de una persona para ver en condiciones de poca luz, no ocasiona ceguera total. Puede crear problemas para ver las señales de tráfico mientras se maneja un auto de noche. También puede tomarle al ojo más tiempo de lo normal el adaptarse a un ambiente oscuro si se estaba en uno iluminado.

La ceguera nocturna es un síntoma de algunas condiciones subyacentes, que pueden tener varias causas.

Por ejemplo, dicha ceguera podría impedir que alguien observe las estrellas durante la noche, o que note los obstáculos en una habitación oscura.

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Para identificar la ceguera nocturna, la Academia Estadounidense de Oftalmología sugiere que las personas se hagan las siguientes preguntas:

  • ¿Moverte por la casa con poca luz es un desafío?
  • ¿Conducir de noche es cada vez más difícil?
  • ¿Es complicado reconocer caras con poca luz?
  • ¿Te toma un tiempo anormalmente largo adaptarte a una habitación iluminada después de estar en la oscuridad?
  • ¿Te lleva mucho tiempo ver en una habitación oscura después de estar en la luz?

Asimismo, otros síntomas pueden presentarse con la ceguera nocturna. La naturaleza de estos síntomas dependerá de la causa subyacente, pero pueden incluir:

  • Dolores de cabeza
  • Dolor de ojo
  • Náuseas
  • Vómitos
  • Visión borrosa o nublada
  • Sensibilidad a la luz
  • Dificultad para ver a lo lejos

 

Fuente: Medical News Today