Andar en bicicleta estacionaria, lo que también se conoce como spinning, es una actividad física segura para la mayoría de las mujeres durante el embarazo, incluso para aquellas que hacen ejercicio por primera vez.
Las ventajas incluyen:
- El ciclismo ayuda a aumentar el ritmo cardíaco mientras minimiza el estrés en las articulaciones y la pelvis.
- La bicicleta ayuda a soportar el peso corporal.
- Como la bicicleta está parada, el riesgo de caída es bajo.
- Más adelante en el embarazo, un manillar más alto puede resultar más cómodo.
En el caso del ejercicio aeróbico de bajo impacto, al menos un pie permanece en el suelo en todo momento.
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Este tipo de ejercicio puede:
- Fortalecer el corazón y los pulmones
- Ayudar a mantener el tono muscular y el equilibrio
- Limitar el estrés en las articulaciones
Algunas clases están diseñadas especialmente para mujeres embarazadas, por lo que pueden ser una buena manera de conocer a otras personas y entrenar con un instructor calificado, lo que a su vez ayuda a satisfacer las necesidades específicas de las mujeres gestantes.
Además, las futuras mamás que ya asisten a una clase regular de aeróbicos deben informar al instructor que están embarazadas, ya que puede modificar los ejercicios cuando sea necesario y aconsejarlas sobre los movimientos adecuados.
Fuente: Medical News Today
