La vitamina C juega un papel importante en el ojo mismo, ya que protege contra el daño causado por la luz ultravioleta. Aunque la concentración de vitamina C en los ojos disminuye con la edad, la dieta y los suplementos que aportan dicho nutriente pueden contrarrestar el problema.
La vitamina C también ayuda a proteger contra el daño oxidativo. El daño oxidativo es un factor clave en dos de las cataratas relacionadas con la edad más comunes: cataratas corticales y nucleares. Las cataratas corticales se desarrollan en los bordes del cristalino, mientras que las cataratas nucleares se presentan en lo profundo de su centro.
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Un estudio longitudinal concretado durante 10 años investigó diferentes factores que pueden ayudar a prevenir el desarrollo de cataratas nucleares. El trabajo involucró a más de 1,000 pares de gemelas. Al final del período de estudio, las participantes que consumieron más vitamina C mostraron una reducción del 33% en el riesgo de progresión de las cataratas. Asimismo, tenían una visión más clara en general.
Pese a ello, una revisión del año 2020 concluyó que se requiere más investigación para identificar completamente el papel de la vitamina C como terapia contra las cataratas.
Fuente: Medical News Today
