Una parte importante de una dieta saludable consiste en comer la cantidad y el tipo adecuado de grasas. Sin embargo, muchos niños comen demasiadas grasas y esto puede llevar a un aumento no deseado del peso. 

Los niños con sobrepeso enfrentan un mayor riesgo de tener colesterol elevado, hipertensión arterial y otros problemas de salud.

Cabe señalar que, pese a la mala fama que han ganado las grasas, la grasa saludable y el colesterol desempeñan un papel importante en el desarrollo del cerebro. De hecho, las grasas saludables son una parte fundamental de la dieta de un niño y no se deben limitar ni prohibir de forma excesiva. 

¿Cómo medir las grasas que consumen tus pequeños?

  • Sirve alimentos que naturalmente tienen un bajo contenido de grasa, como frutas y verduras, cereales integrales, carnes magras y pescado, así como productos lácteos con bajo contenido de grasa.
  • Elige grasas no saturadas y más saludables al preparar las comidas.
  • Escoge una variedad de proteínas, incluyendo carnes magras y aves sin piel, pescados y mariscos —con alto contenido de omega 3—, y opciones vegetarianas, como frijoles y frutos secos.
  • Al cocinar carnes, pescado o aves, opta por asarlos o hacerlos a la parrilla. De esta forma, permitirás que la grasa se elimine por goteo durante la cocción y reducirás las calorías. Por el contrario, los fritos suman grasa.
  • Prepara almuerzos escolares, refrigerios y comidas para las salidas en familia. Así podrás controlar lo que come tu familia. Limita las salidas a comer, en especial a restaurantes de comida rápida.
  • Cuando coman fuera, ayuda a los niños a hacer elecciones saludables. Por ejemplo, incluye una ensalada de hojas verdes en el pedido y usa un aderezo con bajo contenido de grasa. Anímalos a optar por la mostaza en lugar de la mayonesa cuando coman un emparedado. Elige los platos horneados, asados o al vapor en lugar de los fritos.

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¡Ojo! Evita limitar la cantidad de grasa saludable que ingieren los niños menores de 1 año. En el caso de los niños mayores de 2 años, intenta limitar las grasas saturadas a menos del 10% de la dieta. 

Recuerda que la manera más eficaz de enseñar a los niños a tener hábitos de alimentación saludables es darles un buen ejemplo. Para tener un estilo de vida saludable, enseña a los pequeños a escoger bien lo que comen y hagan ejercicio con regularidad.

 

Fuente: Kids Health