Como ya se sabe, debido a que los suplementos alimenticios no requieren receta médica y muchos de ellos afirman ser «naturales», existe la idea errónea de que no pueden interactuar con los medicamentos recetados.
En realidad, muchos de estos productos contienen ingredientes activos que podrían interferir con otros medicamentos. Por lo tanto, los suplementos podrían potenciar o reducir los efectos de los fármacos.
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En una revisión del año 2012, los autores investigaron «interacciones farmacológicas y contraindicaciones asociadas con hierbas y suplementos dietéticos». De esta forma, descubrieron no menos de 1,491 interacciones distintas entre medicamentos y suplementos alimenticios y a base de hierbas.
En particular, los suplementos que contienen magnesio, hierba de San Juan, hierro, calcio y ginkgo tuvieron el mayor número de interacciones.
El hecho de que la mayoría de las personas que toman suplementos dietéticos o a base de hierbas no hablen sobre este uso con sus médicos agrava los posibles problemas de salud.
Fuente: Medical News Today
