Un artículo del año 2021 señala que la diabetes y la hipertensión suelen ocurrir juntas y pueden compartir algunas causas comunes. Estas incluyen:
- Estilo de vida sedentario con ingesta excesiva de calorías
- Obesidad
- Inflamación
- Estrés oxidativo
- Resistencia a la insulina
Una persona con diabetes no posee suficiente insulina para procesar la glucosa o su insulina no funciona de manera efectiva. La insulina es la hormona que permite al cuerpo procesar la glucosa de los alimentos y utilizarla como energía.
Cuando una persona tiene problemas de insulina, la glucosa no puede ingresar a sus células para aportar energía, por lo que se acumula en el torrente sanguíneo.
Los niveles elevados de glucosa en sangre pueden ocasionar daños generalizados a los tejidos y órganos, incluyendo aquellos que desempeñan un papel clave en mantener una presión arterial saludable. Por ejemplo, el daño a los vasos sanguíneos y los riñones puede provocar un aumento de la presión arterial.
Fuente: Medical News Today