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Cerca de uno de cada seis adultos beben en exceso, y casi la mitad de la población de países como Estados Unidos bebió alcohol durante el año 2020. El consumo excesivo de dicha sustancia puede provocar efectos a largo plazo, como eventos cerebrovasculares, enfermedades cardíacas y cáncer.

Sumado a ello, el consumo prolongado de alcohol puede aumentar el riesgo de presentar la enfermedad de Alzheimer (EA), un tipo de demencia que afecta a más de seis millones de personas en el citado país. Y aunque la probabilidad de sufrir demencia también se incrementa con la edad, no es una situación típica del envejecimiento.

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De acuerdo con los expertos, beber con moderación consiste en no ingerir más de una o dos bebidas al día para mujeres y hombres, respectivamente.

Además de beber con moderación, adoptar estilos de vida más saludables puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar problemas de salud a largo plazo, como la EA. Tales opciones de estilo de vida incluyen las siguientes:

  • Realizar actividad física moderada
  • Llevar una dieta equilibrada
  • Evitar el tabaco

Una persona puede consultar a un médico para obtener más orientación respecto a cómo seguir una dieta saludable, dejar de fumar o comenzar programas de ejercicio adecuados.

 

Fuente: Medical News Today