Sabemos que la nutrición juega un papel fundamental en el control de la diabetes, pero ¿existe una dieta especial para los pacientes con dicha afección? La respuesta es no.
No hay una “dieta específica para la diabetes”. Cada caso es diferente y cada persona requiere una alimentación personalizada. En este sentido, es esencial un plan alimenticio o una guía que indique qué tipo de alimentos y colaciones consumir.
El plan también debe indicar la cantidad de comida y los horarios. Para la mayoría de las personas con diabetes, una dieta saludable consiste en:
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Carbohidratos: 40 a 60% de las calorías recomendadas.
Se encuentran en frutas, verduras, legumbres, productos lácteos, entre otros. Es importante elegir las frutas frescas en lugar de las enlatadas o los jugos de frutas.
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Proteínas: 20% de las calorías recomendadas.
Se encuentran en la carne, las aves, el pescado, los productos lácteos, los frijoles y algunas verduras. Se recomienda elegir pollo y pescado en lugar de carne roja. Lo ideal son las opciones sin grasa o bajas en grasa.
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Grasa: 30% o menos de las calorías recomendadas.
Se encuentra en la mantequilla y los aceites naturales. También en muchos productos lácteos y cárnicos. Es esencial evitar los alimentos fritos, los platos a base de mayonesa, las yemas de huevo, el tocino y los productos lácteos altos en grasa.
Recuerda que el cuidado de la alimentación es muy importante para cualquier persona. Sin embargo, es esencial para aquellas que presentan un exceso de azúcar en la sangre.
Especialistas recomiendan hacer una dieta fraccionada, es decir, realizar al menos 3 comidas principales y dos colaciones. La clave está en saber qué alimentos incluir en cada tiempo y no excederse en ninguno.
Para mantener tu nivel de azúcar en la sangre bajo control, es posible que debas reducir el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido de carbohidratos. Esto no significa que no puedas disfrutarlos. Si es necesario, consúmelos con menos frecuencia o en cantidades más pequeñas.
Antes de modificar tu dieta, o ante cualquier duda, visita a tu médico o nutricionista para obtener consejos específicos. ¡Cuida tu bienestar!
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos