Los médicos clasifican las enfermedades cardíacas según la parte del corazón más afectada. El tipo más común es un defecto del tabique ventricular. Este consiste en que la pared ubicada entre los dos ventrículos del corazón nunca se desarrolló por completo en el útero, dejando un espacio.
Asimismo, existen diferentes tipos de cardiopatías congénitas. Puede ser «cianótica», en cuyo caso una anomalía provoca niveles bajos de oxígeno en sangre.
Los bebés con cardiopatía congénita cianótica experimentan dificultad para respirar, desmayos y fatiga. También pueden tener dedos de los pies, manos y labios de color azul.
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En contraste con lo dicho anteriormente, la enfermedad puede ser «acianótica». En este caso, hay suficiente oxígeno en la sangre, pero el corazón no la bombea por todo el cuerpo de manera eficaz.
Ciertos tipos de enfermedad coronaria pueden provocar una presión arterial más elevada de lo habitual. Esto se debe a que el corazón debe trabajar más para bombear sangre, lo que puede debilitarlo.
Finalmente y no menos importante, puede haber presión arterial alta en las arterias de los pulmones, un problema llamado hipertensión pulmonar, el cual puede provocar dificultad para respirar, fatiga, mareos y desmayos.
Fuente: Medical News Today