Apoyar a alguien con problemas de salud mental puede ser un desafío, pero tu apoyo puede marcar una gran diferencia en su bienestar. A continuación, e ofrecemos algunas estrategias para brindar el mejor apoyo posible.
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Escuchar activamente
- Mostrar empatía: Escucha sin juzgar y haz preguntas abiertas para que la persona se sienta comprendida.
- Validar sentimientos: Reconoce y valida los sentimientos de la persona, mostrando que entiendes su perspectiva.
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Informarse sobre salud mental
- Investigar: Aprende sobre el problema específico que enfrenta la persona para entender mejor por lo que están pasando.
- Desmitificar: Ayuda a desmitificar las enfermedades mentales, eliminando estigmas y falsas creencias.
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Ofrecer apoyo práctico
- Acompañar a citas: Ofrece acompañar a la persona a sus citas médicas o terapias.
- Ayudar con tareas diarias: Brinda asistencia con tareas cotidianas que pueden resultar abrumadoras, como hacer las compras o limpiar.
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Animar a buscar ayuda profesional
- Sugerir recursos: Ayuda a encontrar terapeutas, consejeros o grupos de apoyo.
- Respetar decisiones: Respeta las decisiones de la persona sobre su tratamiento y ritmo de recuperación.
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Mantener la comunicación
- Estar disponible: Haz saber a la persona que estás disponible para hablar y pasar tiempo juntos.
- Chequear regularmente: Realiza chequeos periódicos para ver cómo se siente la persona y si necesita algo.
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Cuidar de uno mismo
- Establecer límites: Asegúrate de establecer límites para proteger tu propio bienestar.
- Buscar apoyo: Habla con amigos, familiares o un terapeuta para manejar el estrés que puede surgir al apoyar a alguien con problemas de salud mental.
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Ofrecer compañía y distracción
- Actividades juntos: Realiza actividades que ambos disfruten y que puedan servir de distracción positiva.
- Proponer salidas: Sugiérele salir a caminar, ir al cine o cualquier actividad que le guste y que pueda mejorar su estado de ánimo.
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Ser paciente y comprensivo
- Evitar la presión: No presiones a la persona para que se recupere rápidamente.
- Comprender recaídas: Reconoce que las recaídas pueden ocurrir y que forman parte del proceso de recuperación.
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Fomentar hábitos saludables
- Promover ejercicio: Anima a la persona a realizar actividades físicas, ya que pueden mejorar el estado de ánimo.
- Alimentación y sueño: Ayuda a establecer una rutina de alimentación saludable y sueño adecuado.
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Hablar abiertamente sobre salud mental
- Normalizar la conversación: Habla abiertamente sobre salud mental para reducir el estigma y hacer que la persona se sienta menos aislada.
- Compartir experiencias: Si es apropiado, comparte tus propias experiencias o las de otros para demostrar que no están solos.
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Apoyar a alguien con problemas de salud mental requiere empatía, paciencia y comprensión. Al seguir estos consejos, puedes brindar un apoyo significativo y contribuir positivamente a su bienestar.
Fuente: NIH
