El enfisema es una enfermedad pulmonar crónica y progresiva causada por daño a los alvéolos, los pequeños sacos de aire del pulmón donde tiene lugar el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono.
Con el enfisema, el aire queda atrapado, los niveles de oxígeno en la sangre disminuyen (hipoxemia) y los niveles de dióxido de carbono en la sangre aumentan (hipercapnia). La afección puede complicarse por el hecho de que suele presentarse junto con bronquitis crónica, la cual causa inflamación e irritación en las vías respiratorias.
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Si padeces esta enfermedad, debes estar consciente de que debes realizar cambios clave en tu estilo de vida. Dejar de fumar es fundamental para quienes viven con esta afección y puede ayudar a retardar la progresión del enfisema. Habla con tu proveedor de atención médica sobre cómo puede brindarte apoyo al respecto.
También es importante realizar actividad física con regularidad, ya que esto te ayudará a prevenir la atrofia muscular y la consiguiente progresión de la enfermedad. Sin embargo, no hay duda de que el propio enfisema puede dificultar el ejercicio.
Concretamente, los mejores ejercicios para una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) como el enfisema incluyen una combinación de resistencia, flexibilidad y entrenamiento de fuerza. Tu médico puede ayudarte a determinar qué régimen es mejor para ti.
Fuente: Very Well Health
