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La relación entre la dieta y la salud cerebral ha sido un tema de creciente interés en los últimos años. Recientemente, investigadores de la Harvard T.H. Chan School of Public Health han publicado un estudio que sugiere que el consumo de carne roja procesada podría estar relacionado con un mayor riesgo de desarrollar demencia.

Este estudio, basado en datos recopilados durante más de cuatro décadas, ofrece nuevas perspectivas sobre cómo nuestras elecciones alimentarias pueden afectar nuestra salud cognitiva a largo plazo​.

Hallazgos principales

1. Riesgo más alto:

  • Las personas que comían al menos una porción diaria de carne roja procesada (como salchichas, tocino y embutidos) tenían un 14% más de probabilidades de desarrollar demencia en comparación con quienes comían menos.
  • Además, cada porción diaria extra de carne roja procesada se relacionó con un envejecimiento cerebral más rápido, equivalente a perder 1.6 años de capacidad cognitiva y 1.7 años de memoria verbal.

2. Sustancias dañinas:

  • La carne roja procesada contiene altos niveles de nitritos y sodio, que pueden ser dañinos para el cerebro. También se ha vinculado con mayores riesgos de cáncer, enfermedades del corazón y diabetes​.

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Consejos dietéticos

  • Reduce la carne roja procesada: Limita el consumo de carnes como salchichas, tocino, y embutidos. Estas contienen conservantes y altos niveles de sodio, que pueden afectar negativamente tu salud cerebral.
  • Opta por carnes sin procesar: Si decides comer carne roja, elige opciones no procesadas como bistec o carne de res magra. Estos tipos no mostraron una relación significativa con el riesgo de demencia en el estudio​.
  • Incorpora más nueces y legumbres: Sustituir una porción diaria de carne roja procesada con nueces, frijoles, lentejas o garbanzos puede reducir el riesgo de demencia en un 20%. Estas opciones son ricas en nutrientes beneficiosos para la salud cerebral.
  • Aumenta el consumo de frutas y verduras: Comer una variedad de frutas y verduras frescas proporciona antioxidantes y vitaminas que son esenciales para la salud del cerebro. Intenta incluir al menos cinco porciones al día en tu dieta.
  • Considera fuentes de proteínas alternativas: Incorpora pescado, pollo y proteínas vegetales en tus comidas. Estas opciones suelen ser más saludables para el cerebro en comparación con la carne roja procesada.

Así que ya lo sabes, aunque comer carne roja procesada podría aumentar el riesgo de demencia, hacer cambios simples en la dieta puede tener un impacto positivo en la salud del cerebro a largo plazo. Cuídate y consulta a un profesional de la salud si tienes dudas.

 

Fuente: CNN Noticias