Evitar las bebidas de cola es una excelente idea cuando se trata de prevenir o manejar los cálculos renales. Esto porque la cola posee un alto contenido de fosfato, una sustancia química que puede promover la formación de piedras en el riñón.

Por otra parte, los azúcares añadidos son azúcares y jarabes que se agregan a los alimentos y bebidas procesados. La sacarosa y la fructosa agregadas pueden aumentar el riesgo de sufrir cálculos renales. Por ello, es importante vigilar la cantidad de azúcar que ingieres, en los alimentos procesados, como el pastel; en la fruta; en los refrescos y en los jugos. Otros nombres comunes para el azúcar añadido incluyen jarabe de maíz, fructosa cristalizada, miel, néctar de agave, jarabe de arroz integral y azúcar de caña.

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RECUERDA: Tener cálculos renales aumenta el riesgo de volver a tenerlos a menos que trabajes activamente para prevenirlos. Esto significa tomar los medicamentos que te recetaron para dicho fin y vigilar lo que comes y bebes.

Si actualmente tienes cálculos, tu médico realizará pruebas de diagnóstico para determinar el tipo que tienes. Después, te recetará un plan de dieta específico, como la dieta DASH.

 

Fuente: Healthline